La ruta de las fuentes es perfecta para este día porque nos llevará alrededor y a través de los campos de almendros, frondosos y llenos ya de hojas verdes y almendras que empiezan a brotar, y que en estas fechas no nos los podemos perder, pues aunque las bellas flores ya han caído, ahora, los árboles, resplandecen de otra manera también hermosa.
Esta ruta nos llevará por un paraje sin igual, bajando por la parte media de las paredes de un acantilado (no es peligroso ni mucho menos, sino espectacular, sin embargo no es aconsejable para personas con vértigo a no ser que quieran ir para superarlo, ni para personas con problemas de equilibrio, ya que esta parte pegada al acantilado se les podría hacer complicada). Conforme bajamos iremos entrando en una zona donde hace ya muchos años se cultivaba en terrazas muy próximas al mar. Aún podemos ver las ruinas de la casa payesa con su horno de pan y la era con magníficas vistas, y albercas que casi quedan al borde del abismo. Muy cerca se encuentra la fuente de la que mana agua todo el año, y que da nombre a esta ruta.
Entonces estaremos justo encima de la Punta Rotja, por donde dicen que antiguamente caía una buena cascada de agua dulce sobre el mar, y donde los barcos recalaban para aprovisionarse de tan preciado líquido, y bien cierto que debía ser, pues hoy en día cuando pasas próximo al acantilado desde el mar, todavía puedes ver un hilo de agua cayendo. Pararemos a descansar, al comienzo de la subida en una pequeña explanada junto a un refugio.
La ruta es circular, así que subiremos de vuelta por otro camino entre los árboles del bosque que nos darán sombra y paz. No es una ruta fácil, pero tampoco es que sea muy difícil, aunque sí hay que tener en cuenta, que, aparte de la zona pegada al acantilado, hay bajadas por senderos estrechos y en algún punto, algo empinados, y que tras haber bajado casi hasta el nivel del mar, luego empieza la subida hasta el nivel donde habíamos comenzado en un principio, con lo que de subir no se libra nadie, pero no es una subida fuerte, aunque sí se puede hacer un poco larga para quien no esté acostumbrado, la cuestión es ir poco a poco para no cansarse, pero tampoco extremadamente despacio que a uno se le haga interminable, Hay que encontrar el punto medio. Podríamos decir que se trata de 20-25 minutos de subida.
Esta ruta nos llevará por un paraje sin igual, bajando por la parte media de las paredes de un acantilado (no es peligroso ni mucho menos, sino espectacular, sin embargo no es aconsejable para personas con vértigo a no ser que quieran ir para superarlo, ni para personas con problemas de equilibrio, ya que esta parte pegada al acantilado se les podría hacer complicada). Conforme bajamos iremos entrando en una zona donde hace ya muchos años se cultivaba en terrazas muy próximas al mar. Aún podemos ver las ruinas de la casa payesa con su horno de pan y la era con magníficas vistas, y albercas que casi quedan al borde del abismo. Muy cerca se encuentra la fuente de la que mana agua todo el año, y que da nombre a esta ruta.
Entonces estaremos justo encima de la Punta Rotja, por donde dicen que antiguamente caía una buena cascada de agua dulce sobre el mar, y donde los barcos recalaban para aprovisionarse de tan preciado líquido, y bien cierto que debía ser, pues hoy en día cuando pasas próximo al acantilado desde el mar, todavía puedes ver un hilo de agua cayendo. Pararemos a descansar, al comienzo de la subida en una pequeña explanada junto a un refugio.
La ruta es circular, así que subiremos de vuelta por otro camino entre los árboles del bosque que nos darán sombra y paz. No es una ruta fácil, pero tampoco es que sea muy difícil, aunque sí hay que tener en cuenta, que, aparte de la zona pegada al acantilado, hay bajadas por senderos estrechos y en algún punto, algo empinados, y que tras haber bajado casi hasta el nivel del mar, luego empieza la subida hasta el nivel donde habíamos comenzado en un principio, con lo que de subir no se libra nadie, pero no es una subida fuerte, aunque sí se puede hacer un poco larga para quien no esté acostumbrado, la cuestión es ir poco a poco para no cansarse, pero tampoco extremadamente despacio que a uno se le haga interminable, Hay que encontrar el punto medio. Podríamos decir que se trata de 20-25 minutos de subida.
PUNTO DE ENCUENTRO: Parking de Santa Inés, justo detrás del Restaurante Sa Palmera.
HORA DE ENCUENTRO: 09.30h (para empezar a caminar a las 09.45)
DURACIÓN DE LA ACTIVIDAD: La ruta dura 3 horas – 3 horas y media, dependiendo del ritmo, así que estaremos de vuelta hacia las 13:00- 13:15 .
QUÉ HAY QUE LLEVAR: Ropa y calzado deportivo, botella de agua, almuerzo y crema solar, pero no olvidéis el chubasquero, que aunque se mantenga dentro de la mochila, siempre es mejor llevarlo en estas fechas.
PRECIOS PROMOCIONALES
ADULTOS:6€
NIÑOS A PARTIR DE 7 AÑOS:3€
NIÑOS MENORES DE 7 AÑOS:Gratis
OBSERVACIONES:La ruta no es apta para llevar carritos de bebés, ni sillas de ruedas. Los bebés deberán ir acomodados en mochilas porta-bebés.
INFORMACIÓN E INSCRIPCIONES:
TEL: 676075704.
CORREO ELECTRÓNICO:info@ibizamundoactivo.com
Es muyIMPORTANTE al apuntarse dar nombre y apellidos de todos los participantes y un tfno. de contacto. Si se va en grupo o luego se avisa a algún amigo que vaya a venir a la ruta basta con tener una persona de contacto del grupo, más que nada para facilitar el poder avisar de cualquier contratiempo para la actividad antes de empezar.
Si alguien no sabe hasta el último momento si podrá venir, no hay problema. Simplemente bastará con que antes de salir de casa lo comunique llamando por Tfno. por si hubiera habido algún contratiempo para realizar la ruta.
0 comentarios:
Publicar un comentario